lunes, 25 de mayo de 2015

Quiero invitarte a salir del mundo.

Un amigo me dijo que posteara alguna canción de mi autoría con la música para que algún iniciado en la música la interpretara. "Es como lanzar inspiración en un botella al mar" me dijo. Me encantó lo que me dijo. Entonces, ahí va una elección personal para compartir. Quiero invitarte a salir del mundo Compartirte un café. Traigo algunas sales debajo de la piel. Quiero llevarte no digas nada Si el futuro habló esta vez. Siempre me acuerdo tarde y me ocupo después. Amar se conjuga en presente definido Somos carceleros de sueños instintivos Si ahora nos llega la marea en la mirada Tan solo viajemos un siempre sin escalas Re-sol Re-sol Re –fa#m-sol-la Simla-sol-mim-la7M. fa#m-sol-mim-la7M

viernes, 15 de mayo de 2015

Fuga de la página 70.

Estaba ya un poco cansado de su vida. Había nacido de la mente de un escritor. Tenía sus partes más fracasadas. Marcos vivía en una novela. Estaba en un relato policial donde siempre aparecía como sospechoso. Se titulaba “Cuestión de fugas”. El era un personaje oscuro. El era el solitario. El poco sociable. El anti-carismático. El que abría y cerraba los bares. El que no tenía talento. Se había cansado de ser fregado y quería algo distinto. Su condición de víctima la había definido el escritor en la página 23. Casi de entrada y hasta el final tenía esa carga tortuosa. No le otorgaba otro rol que ése. A medida que el relato caminaba, extrañamente, la compasión de los lectores le daban cierta energía. Cada persona que leía la novela esperaba que él no fuera el asesino. De hecho, no lo era. Tampoco la mucama. Ambos eran los primeros sospechosos. Pero ese deseo en colmena de quienes leyeran el libro, todos pidiendo lo mismo, le sumaban razones suficientes para abandonarlo. Le daban vida. De a poco juntaba fuerza. Había otros personajes de mayor participación en la historia. Sin embargo, Marcos lograba aunar a los pensamientos en uno. Todos sentían pena por él. Veía como las miradas de los lectores se llenaban de tristeza e impotencia a medida que avanzaban en su vida. Pedían que no le pasara eso. Marcos no tenía coraje pero de tanto ser pensado algo le había sucedido. Su creador le había hecho sufrir tormentos, acosos, arrestos violentos y celdas hasta casi las últimas páginas. Marcos estaba decidido a escaparse de la novela. Entonces planeó la fuga. Entre el silencio de las librerías se conocía con la mucama desde la página 34. Se encontraban en la 69. El escritor no les había dado siquiera un pensamiento de amistad. Intrínsecamente estaban unidos por la condena. A Marcos poco le importó. De a poco se convirtió en un actor que sólo aparecía en escena cuando alguien abría la novela. Quería irse. Además soñaba irse con ella. Sabía que podrían salir del libro si encontraban la forma de mantener al menos su color. Cada vez que compraban la novela se preguntaba si tendría alguna chance de huir. Se vendieron cientos de ejemplares. No perdía la esperanza. Una mañana de noviembre, primaveralmente lluviosa, una mujer compró la novela. Al llegar a la boca del subte la mujer resbaló por las escaleras. Su bolso se le fue de las manos. Se vació y cayó el libro hacia el lugar inundado. Era la oportunidad. El día deseado. La tinta se diluía en el agua. Marcos cambió de forma y se marchó junto a su amor. Marcos se diluyó en el agua mientras la mucama fluía a su lado. La mujer se repuso, bajó por sus cosas y entre ellas, alcanzó al libro que mostraba varios párrafos en blanco en su interior. Las partes de Marcos y la mucama se habían esfumado

domingo, 3 de mayo de 2015

Planeta Jardín

Estoy en casa impaciente por ir a buscar a Cata al jardín. Me envuelve un aroma de vainillas y frescura en la previa de lo que va a pasar en la puerta. Las caras de los padres emergen desde otros mundos para conectarse con el planeta jardín. Allí sucede que estando, solo estando, se vuelve a la más tierna edad y todo crece en forma de aprendizajes múltiples. Todos aprendemos. Es un Planeta en donde lo que sembrás, lo cosechás en minutos. Es bueno volver a aquella época en la que éramos nosotros inocentes y queridos, pulcros y obedientes.Entonces estamos en un lugar seguro. En una guarida en la que nos sabemos todos sin conocernos. A Cata , nada le fue sorpresa. Estoy impresionado de su popularidad y su asistencia perfecta. No tiene peros a la hora de ir a la escuela. Le encanta. Me y nos encanta que le encante. Entonces estamos todos encantados.Nada más acertado el nombre de jardín a la escuelita inicial. Es fácil acompañar lo que naturalmente se hace natural. Aun así cuando me doy cuenta que prefiere más estar con su "seño" que con nosotros.

sábado, 2 de mayo de 2015

Beso de verdad.

Y si llenamos la copa de tinto esta noche? y si somos mar por unas horas? Y si buscamos aquellas risas en el cajón? y pensamos en las palabras no dichas? Todo eso que rompe los silencios y las dudas. y mira en palabras descifradas. Hablemos bajito. Y si nadie nos requisa la ilusión. Solo habrá sitio para un beso de verdad.