viernes, 4 de octubre de 2013

Diego

Hace algún tiempo que es ídolo. Parece ser que adquirió esa categoría al hacernos emocionar alguna vez y algunas veces. En la gloria y en la derrota. No hay persona más argento que Diego en su rol. Así somos. Corazón desbordado. Mente inextricable. Desafío contraditorio de normas y reglamentos. Diego necesitó su soberbia para salir de la extrema pobreza. Del mate compartido sin nada para comer. De la solidaridad. Del amor. Aún en la derrota es un grande. Aquél que se levanta es aún más grande que el que no ha caído. Siempre voy a bancar a quien se anime. A quien ilusione. Hay dos formas de ver ésto. La realidad quita la ilusión es una. Vivir la ilusión es otra. Una vez más. Gracias Diego (10).

viernes, 14 de junio de 2013

Certeza VI

El único exámen que tenemos que aprobar es el de nuestras propias decisiones.

Certeza V

Los monstruos se esconden siempre debajo de lo que queremos olvidar.

Certeza IV

Somos lo que creemos.

Certeza III

La verdad no trae sólo luz. Siempre encandila.

Certeza II

En éste preciso instante alguien empuja una puerta en donde puede leerse "tire".

Certeza I

Si a la vida me la lleva el tiempo, que mis besos se lleven tus peros.

jueves, 9 de mayo de 2013

Llegaste

Llegaste temprano y casi sin preguntar te dejé entrar. Abriste los candados y las llaves de hierro forjado como solían hacerse a la antigua. Sólidas y perpetuas. Ví que tu suavidad lo colmó todo y me perdí en algún lugar sin retorno. Olvidé los desamores y las penas. Se esfumaron. Las cicatrices suelen ser heridas que tienden a superarse. Al cerrar los ojos dormí una siesta casi interminable en tu regazo imaginando futuro. Proveyendo bonanzas. Todo fue frágil y enérgico como una mueca que sería carcajada. Ahí en el ensueño de creer que serías mi futuro, ahí nomás, te comencé a amar.

sábado, 4 de mayo de 2013

Y qué sé yo.

Y qué sé yo si volver es escribir de nuevo. Y que sé yo si escribir de nuevo es imaginarse ser leído. Y qué sé yo en donde andará la cabeza al terminar éste escrito. Y qué sé yo si terminarlo no implica un recomienzo. Y qué sé yo si me deambularé con las palabras como me desvela la incertidumbre. Y qué sé yo si morderé la realidad con remordimientos.Y qué sé yo si sé lo que creo saber. Tal vez sea que nada sé de lo que tengo que saber.Y eso es lo que se sabe por siempre.