sábado, 29 de agosto de 2009

Cotidiano


Por la mañana devoran las rutinas
No hay forma de encontrarse
Todo el tiempo a la vez
Son las veces que se lleva el tiempo.

Por las tardes extraño el hogar de tu mirada
Las infinitas buenas tardes ciegan
la reciprocidad del trabajo compartido
donde la identidad se evapora en asfalto breve
y todo se hace idéntico y normal.

Por la noche la luna se lleva la edad
aún no sale el verbo encontrar,
sabemos que se esconde mezquino en los acordes del día.
La vida es una explicación inconclusa.
Y buscamos los detalles de la risa
en los rincones simples
A pesar de conocer mucho
No sabemos nada.

jueves, 27 de agosto de 2009

Samurai

”La estrategia es cosa de reflexión, la táctica es cosa de percepción”.
G.M. Max Euwe

Un samurai no pudo evitarlo. Se enamoró de una doncella.
Ella le exigió lealtad de su amor y le dijo,
---Si vienes a visitarme durante 100 días seguidos a mi puerta. Creeré en tu amor como algo verdadero, y seré para tí por los tiempos que me falten por vivir.---
El samurai, inequívoco en su disciplina, fue a su puerta con una banqueta todas las noches. En sus esperas, por cada diez respiros brotaba un suspiro, se atusaba los bigotes y se quedaba sentado, más quieto por sus armaduras de gala que por su ansiedad, mirando a su ventana. Ella se asomaba, le saludaba meneando la cabeza de un modo reverente y luego apagaba las luces. Al terminar el ritual, él partía sereno.
Llegó a la nonagésima novena noche.
Recogió su banqueta. Ella le sonrió.
Y sólo murmuró bajito.
--- He callado tanto que ya me he cansado de hablarme.---
Asi, en silencio, se fue eligiendo la batalla de no verla más y verla siempre.

miércoles, 26 de agosto de 2009

besojos

"Un beso activa hasta 34 músculos faciales, quema 18 calorías, tiene un 60% agua, 0,4% de sal, 0.7% de grasa, 0,7 % de proteínas y 40.000 microorganismos cambian de dueño elevando hasta 150 pulsaciones por minuto el ritmo cardíaco."
de "The art of kissing" de William Cane.

Sentado a la vera de su cama le besaba a mi hija Renata en la frente antes de dormir. Tal como lo hacía mi abuela conmigo. Ella recostada con las muecas residuales del día, me miraba con los ojitos cerrados.
---Para que pienses en lindos sueños--- le dije cierta vez.
Esa cierta vez, casi en vigilia, entrando al mundo de morfeo, se incorporó, tomó con sus manitos mi cara, y me flechó besándome los ojos.
--- Para que cuando despiertes veas todo con amor---me dijo.
Desde ese instante eterno, doy besojos.
Desde esa cierta vez, cierta como pocas son las cosas ciertas, se instaló en mi diccionario de vivencias exquisitas
.
Dar Besojos:(del lat.dare bassium oculus) dícese de aquella acción de entregar tocando u oprimiendo los labios en los ojos para renombrar la ternura.
.

domingo, 23 de agosto de 2009

El efecto residual

"La mente libera en sueños los secretos que se callan despierto."
del coleccionistadesoles.

Entonces soñé. Sobre una costa escarpada divisé una barcaza al garete. Las velas izadas al viento del este le trazaban un rumbo desigual. El viento me hacía llorar los ojos y me ladeaba para no sentirlo tan de frente, y a la vez, no dejar de mirar. Me sentí expósito de afecto. Ví perderse la tarde entre la línea del horizonte y el poniente. Creí haber buscado cómo cambiar de sitio. Quería montar esa nave que tenía espejos por todos lados. Quería saber como navegarla. Quería conversar con las cañas agolpadas en la popa, como estiletes, que eran como dulces para tentar a Poseidón. Se acercaba a la costa con las últimas luces de la tarde y se mofaba del vaivén del oceáno. Me atreví a caminar el risco. Quien camina oscuridades suele encontrar luces. Me animé. A pesar de la bravura de las olas, a pesar de la penumbra. Ese acantilado fue el límite natural, no el agua, no las olas, no el viento, no lo que sentía. Porque me decía que no pensando en un sí, mientras alguien despotricaba desde la barcaza. Se quejaba de la magra pesca e invocaba a toda su familia no querida. Era una hermosa sirena venida a mujer. Estaba cerca, muy íntimamente cerca. Hablaba sin reparos de la mala elección de la carnada escogida, y que sólo sacaba burriquetas y bagres. Creía que sus redes no eran efectivas. Había tenido suerte en sus mocedades, pues cautivaba con sus cantos a los peces que, encantados, acudían al llamado. Ahora, gritaba que no le serviría lo pescado para comer y para dar de comer a su comarca. Atiné a hacerle señas, sin darme cuenta le había hecho señas desde siempre. Tan solo tenía que pensar como pez y al intentarlo su faena cambiaría. Al mirarme, no me vió. Giró la cabeza hacia abajo, como fundiéndose entre las cañas, y me ignoró. Sabía que era lo que la contendría. Lo que la completaría de gozo. Lo que le dejaría una eterna sonrisa instalada. Supe su decisión de no compartir ese mar conmigo. Me senté en la cornisa a desafiar el viento y el vértigo de la altura. La ví partir junto a la luna entre lo salado y lo dulce. Al despertar, cayó el cuento leído de Luisa Axpe… las cañas....
“Si señor, las cañas hacían ruido. Eran como unos crujidos de madera, o como cuando se quema la maleza verde, vio esos tallos gordos llenos de agua que parecen que explotan todos a la vez….”
Mi sueño detonó al despertar en otro universo. El sueño en exacto efecto residual de la mente que no descansa.

miércoles, 19 de agosto de 2009

Con fe so


"A lo largo de nuestras vidas nos mantenemos en silencio acerca de quienes somos, acerca del que sólo nosotros conocemos, y no podemos revelar a nadie. Pero sabemos que aquello sobre lo que callamos es la verdad. Somos lo que callamos".
Sándor Márai.


I
(lo que es)

Llevarme tu magia prestada sin recibo.
Tus sueños, los que aún no han venido.
Tus libros, los que aún no has escrito.
Tus búsquedas, las que aún no encontraste.
Tus palabras, las que aún dicen instinto.
Tu sexo, el que aún mordiendo no daña.
Tu forma de ser espontánea, intensa, inquieta.
Sabía que me llevaría a quererte como te quiero.
Porque todas las risas te nombran.

II
( lo que sería)

Me desvela creer que existís,
ahí, donde el puente es adorable.
En ese momento exacto cuando somos el mismo río,
en un espejo que trasluce el cristal,
que atraviesa los bordes y llega a las orillas.
Una visión de futuro sin edad.
Imagino tu olor a mujer.
Tus besos rojos.
Tu mirar disperso.
Tus idas y vueltas a éste mundo, a otros mundos.
Tus luchas inclaudicables.
Tus silencios que dicen todo.
Tu pensar que equivoca tu boca
y que no erra sentires,
Tu escucha precisa.
Tu forma de decirme te quiero sin decirlo.
Porque practico bajándote estrellas.

III
( lo que será)

La distancia es un concepto mental
al instalarte dentro de mí.
Al menos en sueños te sueño.
y confieso,
Te quiero tanto que decirlo resulta poco.
Porque si no lo digo no soy.


-.-

lunes, 17 de agosto de 2009

El autor ha eliminado ésta entrada.


¿Para qué contar un siempre que se fuga del paladar
callando su impotencia por la puerta de salida?


En la vida secreta de las palabras,
sólo el instinto me insiste que...
aún queda tiempo para echarnos a andar.


sábado, 15 de agosto de 2009

Cuestiones de luz


Eran las cinco de la tarde de un verano que asfixiaba. Caían los gorriones como bolsitas y no paraban de revolcarse en la fuente de la plaza. La ciudad semidesierta claudicaba de aguas. Todos transpiraban ojeras de malhumor. Enzo estaba solo. Ni se acordaba desde cuando. Tenía un local y vendía productos eléctricos zozobrando la crisis. Hacía tiempo que sus clientes optaban por el supermercado. No le encontraba la vuelta. Su negocio estaba apagado y tratándose de una casa de electricidad resultaba raro. Pocos clientes, pocas ventas, pocos sueños. De golpe entró un señor muy bien vestido.

--Buenas—

--¿ Cómo le va?,¿ qué día no?,¿ en qué le puedo ayudar?—le indagó Enzo.

--Mire, quien le va a ayudar creo que soy yo—le dijo el trajeado.

El tipo intimidaba. Parecía un pastor de la medianoche de televisión, de esos que prometen y buscan donativos. Enzo tenía más conflictos que el Medio Oriente. No estaba para sumar a la resta. Entonces, amagó una excusa para no atenderle.

--Tengo que hacer, dígame qué necesita—

--Que me escuche. Mire, vendo sombras ¿quiere ver alguna?— le dijo mientras abría una maleta de viaje con distintas etiquetas en la manija y en los cierres. El hombre parecía un viajero y revolviendo adentro de la maleta continuó hablando lento.

---Vea, tengo sombras de más o menos intensidad. Me quedan pocas grandes. Tengo por acá, a ver, la cuestión es que con el verano vendí las mejores. Me va muy bien—aseguró.

---Señor, si esto es un robo lamento decirle que no tengo plata— dijo Enzo resignado.

---Tranquilo, mi oficio no es común. Le muestro y después me dice—

---Pare ahí un poco. No necesito ésto precisamente….— afirmó Enzo encendiendo un cigarrillo. El humo le tapaba la cara.

---Claro. Esperaba que me lo dijera. Es lo que me dicen todos los que me compran. Le explico un poco el asunto. Las sombras que uno lleva se cansan de uno. Necesitan andar en otras formas y otros cuerpos por un tiempo. Más si el amor no le llega, mi amigo—

-- Pseeee…¿ Qué tiene que ver el amor?--

--- Es un flujo de energía. Las sombras retienen el amor perdido, son una proyección de nuestros cuerpos.¿ Quiere probar alguna de las que tengo?. Esta le va a quedar bien. Pruébese ésta. Era de un tipo más corpulento que usted. Ahora está felizmente en pareja. Con una familia preciosa. Le canjeé su sombra por una más tenue. No quería llamar mucho la atención, ¿vió?. Su vida brillaba demasiado. Pruébesela. ---

--- Creo que está loco. Pero no me voy a quedar con la duda.—Enzo agarró la sombra del mostrador y se la probó. Se sentía cómodo. Distinto. Como más relajado. De a poco, le invadía una sensación de soluciones.

---Vea mi amigo, llévesela. Mañana paso por acá y me dice si se la quiere quedar. En ese caso, le tomo la suya en parte de pago y me paga la diferencia.—

--Pero…¡no me dijo cuanto me va a costar!—

--Nada que no pueda pagar--- reafirmó el trajeado.

--Bueno, nos veremos mañana entonces--- dijo Enzo.

Esa tarde Enzo bajó la cortina más temprano que de costumbre. Paseó por las calles sin un rumbo determinado. Sin apuro por llegar. Suelto. Quería saber que sucedería por la noche. Su nueva sombra le agigantaba el espíritu. Le daba más luz. Más ganas. Le hacía bien y no sabía bien porqué. No quería volver a su casa. Quería que esa sensación le perdurara. No quería dormirse. De hecho, no durmió. Estaba energizado. A la mañana siguiente, compró pintura y pinceles. En unas horas pintó el local al rayo del sol, haciendo alarde de su sombra sobredimensionada que le daba frescor. Casi no transpiraba. Compró algo de ropa nueva, puso música y fotos de sus amigos en el local. Algo en él había cambiado de repente.

Entrada la tardecita apareció el trajeado.

---¿ y?, ¿cómo le quedó?, veo que le hizo bien…---

---Si, no lo creo todavía…--- respondió Enzo temeroso.

--- Le pasa a todos, quédese tranquilo. Hablemos de la diferencia. Ya se habrá dado cuenta que no tiene un precio…tiene un valor.---

---¿ A qué se refiere con valor?, no me asuste.---

---Mire Enzo, su vida cambió tan sólo en un día. Mírese al espejo. Es otro. Eso habla claramente de la efectividad de mis productos. Casi no necesitan service. Eso es calidad.---

---Ahá, entonces, ¿ qué viene a cambio por la diferencia?.--- indagó Enzo.

---La calidad lo es todo, mi estimado. Déme su sombra y su capacidad de amar por la diferencia. Seguramente con ésta la va a recuperar en poquito tiempo--- le sugirió el vendedor.

Enzo pensó presionado. El producto era realmente bueno. Había notado sus efectos inmediatos. Estaba confuso. Como aturdido. No había reconocido su potencial hasta ese momento. Otro lo descubrió por él. Otro le mostraba el verdadero valor. Le canjeaba espejos por sueños. Sombras por ilusiones. Bienestar por amor. Fue así que mirando fijo a la nada pensó. Volteó hacia el viajero y murmuró.

---No la quiero, gracias. Tenía razón en que me ayudaría. Acabo de rescatar mi valor---

El vendedor le sonrió con una mueca cómplice. Guardó la sombra de muestra. Y llegando a la puerta del local dijo por lo bajo.

--- Hizo bien amigo, esa sombra le quedaba chica en realidad.---

viernes, 14 de agosto de 2009

Helena


“Helena, ¿existe el amor?"
" Existe una luz adentro, que se enciende cuando le das la posibilidad.”
de las charlas con Helena Currual, machi del pueblo mapuche.

Eres lo que fuimos
Viento de lunas
Mar para beber
Horas sin tiempo
Ciega del miedo a amar

Soy lo que fuimos
Sol de mayo
Camino abierto
Incrédula verdad
Mudo por quimeras del viaje-luz.

Que más podrás ver,
Que más podré callar,
si hasta las penas ríen ironías
en el tiempo de esperarnos.

Vamos por esa posibilidad de la mano
si el día y la noche son lo mismo
cuando estamos iluminados desde adentro…
Siempre desde adentro…
.
(poema escrito en la reserva mapuche Laguna LLon, que Helena con la sonrisa instalada de madre-tierra pegó en una pared del refugio junto a una frase de Charlatte, un honor para mí llevarme su mirada y la imagen de su simpleza.)

jueves, 13 de agosto de 2009

Semáforos



Me arrastra el infierno del sinsabor.
Nuestros cueros impacientes viviendo entre semáforos.
Ruidos al ritmo de las noticias que nada cuentan.
Olores pérfidos que no perfuman.
Miradas que esquivan miradas esquivas.
Bocas que diciendo ojeras callan el día.
Manos que tocan más cosas que personas.
Amores de confort que salan la piel.
En éste zoológico de animales sueltos y gente atada.
En ésta encrucijada de almas perdidas en el revés del mundo.
Aparecés convidándome ternura en café,
ya no compito con palabras tácticas y frases de neón.
Y una caricia a tu pelo tiene el valor de un que linda te ves.
La trama se enriquece en luz verde al llegar a tus costados.
Y es suficiente propuesta el beso eterno a tu suavidad
que revuelve el viento en mi espalda haciéndole alas.
-.-

miércoles, 12 de agosto de 2009

Detrás de mí.

Envuelto en papel de diario
Llego colmado de rutina.
En la necesidad que detiene,
laten circunstancias remotas.
Soy voces que me llaman
y cuando llego callan diciendo todo.
Un hombre que se fugó del tablero
siendo peón con la sombra de un rey.
Mientras los pasos que camino descalzo
se miden desde mi cama a tu recuerdo,
todo queda en suspenso y
los días son mis bordes,
Si entre tanto silencio ensordecedor
las luces también se fueron a dormir,
¡Qué me vayan trayendo años!
Porque mi tiempo se evaporó
detrás de aquella risa fresca,
y aunque sienta que me alcanzará el olvido
sé que algún día volverá
en todo tu regalo de ser.
-.-

martes, 11 de agosto de 2009

Los mares del tiempo (de los nombres del mar)


“No tengas prisa, el tiempo es algo que quedó atrás”. Aute.

Si resulta que el tiempo trabaja en un plano direccional, la cuestión a dirimir es; ¿cómo no perece?. Nunca se acaba. No se termina. Vivir implica un desplazamiento de momentos. A veces, me encuentro con tiempos en los que sin darme cuenta fuí feliz. Tal vez, ese tiempo sea éste, porque al no darme cuenta, eso podría suceder tranquilamente. A pesar de los ida y vuelta, no recuerdo haber sido infeliz, pero eso es harina de otro costal. Vuelvo al tiempo. Algunos registraron hitos. Culturalmente asociados, porque después de todo somos gregarios. Cuando pretendo traerlos al presente, no son lo mismo. Claro, como van a serlo, si pertenecen a un grupo de afinidad y a un contexto con otras necesidades. No creo en el “dale pa adelante”. No revisar crea penas. Es como la luz en el tablero que indica que al motor le falta aceite. No se tapa eso. Los indicadores advierten el tiempo. Lo marcan mejor que el reloj. Hay, sin embargo, tiempos atemporales. Eso me pasa con los sentimientos. Con algunas personas. Aunque nadie es igual en un contexto de tiempo, parece que como continúan las mismas rutinas, son las mismas. Tal vez, lo sean para uno. Seguramente no para ellas mismas. Fabiano es un amigo atemporal. Vive al pie del reloj. La hora que determina los quehaceres. Rara vez, cena después de las 10 de la noche y cuando lo hace se pone de malhumor. Ordenado es su apellido. Da la sensación de que nada le ha sucedido desde que lo conocí. Sé que no está igual. Se casó. Tiene una hermosisima hija y una leal compañera de ruta. Un trabajo que cumple con creces. Casa. Auto. Progreso medido en términos económicos. Una perlita del sistema. Tuve la oportunidad de verlo en la costa. Distendido. De vacaciones. Y compartimos una charla acerca del tiempo.
---La verdad es que estamos acá para sobrevivir y tener lo mejor. La mejor mujer, la mejor escuela para la nena, la mejor casa, el mejor status. El tiempo se invierte en eso. Son las 11. Ahora a las 2 vamos a almorzar. A las 3 están los títeres y a las 5 hacemos unos mates…—Aseguraba mientras descifraba mi mirada ida.
Antes de contar lo que contesté, debería hacer una salvedad. Jugué ese juego algunos años. Convencido. Hoy siento que ésta forma de ver la vida no vale tanto la pena.
--- Traé el mate ahora.¿Porqué planificás las ganas?. El tiempo que uno desea no está en los horarios. No está en el “te quiero para siempre”, ¿qué sabés que te va a pasar mañana?. Salvo que hayas leído algo que no se ve. Te creería porque a mí me pasó y me pasa, con el destino. Siquiera el tiempo del deseo está en el momento en que te digo ésto. Hoy estamos en una matriz real. Aunque la película sea un hecho virtual. Me parece que crea parámetros de supervivencia. Te aleja de la naturaleza de la emoción. Seguro que si te parás a ver la luna ésta noche no aguantás el frío y la bruma.--- dije riendo.
---y claro…vos sos un tipo más sensible. Si no te conocieran creería que estás fumado. A mí eso no me importa.— dijo mientras se bronceaba en la orillita.
Entonces entendí. Es un orden de prioridades pero con bases diferentes. A dónde se habían endurecido sus emociones. Quién se las tragó. Qué lo motivaba. Planteaba supervivencia y yo vivencia. Para mí no había pasado el tiempo porque no veía sus cambios. Nunca los hubiera visto si la perspectiva en mí no cambiaba. El mar se enturbió a marrón en La Lucila, cosa que podría ser normal por la influencia de corrientes del río de la plata, pero, justo en ese momento. Algo que el no vió. Un momento en que cada uno disfruta en otros planos. En otros tiempos de ser. El mar de los amigos que nombra el sentimiento pasado. En el presente con olas que se sienten por historia.

domingo, 9 de agosto de 2009

Mientras

Mientras levite al recordar quien fui.
Mientras tus verbos cuelguen colores en la cama
Mientras se me infle un pulmón cada vez que respires
Mientras vivas en música violeta y menta
Mientras muera por esperar que no te mueras
Mientras tu cuerpo sea milagro del beso
Mientras mis costados compartan tus noches
Mientras seas manos que aniden en soles
Mientras dude caminos que no entienda
Mientras vueles sembrando azúcar y sal
Mientras mi azul quiera ser más verde y más rojo
Mientras sueñes en un mundo dormido
Mientras tanto no sea tanto que se lleve el tiempo
Mientras que el aire sea aquello que se evapora de tu risa
Mientras…
voy a amarte aunque no quieras,
y seré hierro forjado aunque oxidado
consecuencia de la lluvia que me empapa por dentro.
-.-

viernes, 7 de agosto de 2009

color primario- Rojo

“La vida no se mide por la cantidad de veces que respirás,
sino por los momentos que te dejan sin aliento”
de Hitch.


La manzana del edén mordida era roja. El rojo es un color socialmente picante. El color del demonio culturalmente aceptado es rojo. Como la sangre y la pasión. Los especialistas coinciden en que es un color provocador, irritante, y ciertamente el más llamativo de los colores primarios enseñados. Roja es la capa del torero, los símbolos de stop, las luces de un hotel de alojamiento, las bragas que provocan, el color del deseo. El rojo no descansa. Las piezas no se pintan de rojo porque invitan a no dormir. Rojo es el rubí, la piedra mas amada por las aventureras según “Cosmopolitan”. Las ferraris son rojas, la tentación tiene ese tinte. No existen casamientos de rojo. Si existen las damas vestidas de rojo, envueltas en la necesidad de sobresalir, de generar deseo. Estás en rojo cuando estás en falta. El descubierto bancario en la jerga es “estar en rojo”. Tarjeta roja es la del árbitro que expulsa del juego a los jugadores. “Red” es un bar de San Francisco donde, entre otras cosas, ofrecían transfusiones de sangre. Mi amor es rojo, decía Goldín en su canción más bonita. Rojo es el semáforo que hace detenerse, la marca de la coca cola para resaltar, los atuendos de papa Noel, la cruz de la bandera del inglés que no se cree europeo, la sonrisa del boxeador, el color que lastima y provoca, que sugiere y anima, el derrotero de la armonía, el color que atrae. Rojo el color de la izquierda que demanda lugar político, el que lo siente lo usa .Atreverse es usar rojo. Aunque sea en un detalle, un rush, una corbata, un pin, una señal. El color del calor, del desafío, del que transgrede, del que incita e excita. El evitado, el que choca, el que manda en los colores….rojo es Marte y amarte.
Que sería de mí sin rojos, en algunos momentos como se da la vida.

color primario- Azul


"Lo que se niega no avanza"

Me repito en esquemas que ya no son
Traslado mis ausencias sofocando.
Hay días en que ya no quiero querer
Morir en tus brazos ha sido una consecuencia de mí mismo.
Un espejo que estalla en maldiciones tardías.
Trazo puentes que se derrumban en el olvido
y hacen paralelos los meridianos energéticos
quizá ésta lección no me fue dada
Tanta vida he vivido,
que si he de morir,
al menos merezco la risa en tu recuerdo
que será la ironía impotente
de tu almaenpena azul.
-.-

color primario- Amarilla

“O que é morrer de fomme frente al mar.”
Djavan, esquinas.


Su cuerpo dorado estremecía ocasos
Flor que gira al sol esperando
Te busca la mariposa posando en tu alma.
Dos soles en su vientre le daban tres vidas.
Juntaba limones como colillas del suelo
Oro en sus ojos por limosnas de cobre.
Debajo de la autopista de ricos
Coagula brillante el caldo de pobre
y la luna amarilla siempre abierta
es la única invitada a cenar.

miércoles, 5 de agosto de 2009

El espiral

"Cuando tomes el aliento de un beso de amor real, te quedarás con una parte del alma de aquella persona..."
de las charlas con Helena Currual, Machi del pueblo Mapuche.
.
No sé pedir,
y el cielo se nubla de dudas ciertas
El presente pide y pide
y ruin es creerle el alma
porque a veces mira lo que no se ve.
Pedimos lo que nos falta.
Pedimos no estar solos.
Vos, yo, nosotros…
no sabemos pedir.
Pedirse a sí mismo es pedir.
Mientras las horas son espirales eternos,
me hago un pedido.
Seré felíz hasta cuando no estés.
Y el tiempo fluirá olas entre ceños fruncidos
hasta que creas que volverías.
No sé cómo, ni cuando, ni dónde.
Sólo ahora sé
Que eso no hace falta.
pues te quedaste en mí
siendo destino.

-.-

lunes, 3 de agosto de 2009

Sueño


Todo lo que vemos o parecemos es solamente un sueño dentro de un sueño.
Edgar Allan Poe.


Duermo cayendo sobre el libro fiel
y los ojos pesan las últimas palabras.
Un silencio trae el zumbido tardío del día.
Levitan las sombras a la mesa de luz
y algunas otras se cuelgan de los percheros.
Hay manos que contienen escaleras al cielo.
Vigilia de imágenes regaladas.
Premio consuelo que consuela premiando.
Cuando entro al mundo del sueño,
columpio en albedríos sin edad.
Ya no atiendo, ya no agrado, ya no acecho, ya no pienso
La parte que se imparte para ser un todo.
Pieza del rompe-cabezas clave.
Despertar soñando despertar,
que vuelve absoluta la marea del cuarto menguante
y vibra creciente siendo luna.
ahí, donde fuimos siendo actores imprecisos,
ahí, donde pierde noción y gana el encuentro.
Mientras me cuelo en adjetivos y te traigo;
Ríe la simpleza vestida de mañana
y las noches no se hacen solitarias
cuando llega la mejor versión.

-.-